¿Está jugando conmigo?

La confianza. Eso forma el lecho de roca de cualquier relación sana. Por eso, cuando entras en una relación, te gustaría confiar en tu pareja y no buscar signos de deslealtad, engaño o traición. Pero no quieres que te tomen el pelo seguro ni quieres sufrir el dolor de un corazón roto.

Entonces, la pregunta que se plantea es: ¿cómo saber si una mujer está jugando contigo?

No puedes confiar plenamente en tu pareja y, al mismo tiempo, asegurarte de que no te está utilizando ni se está aprovechando de ti. Se trata de un terreno resbaladizo en el que puedes encontrarte en los primeros días de una relación. Puedes caminar por la cuerda floja equilibrando ambos aspectos sin comprometer ninguno. Puedes estar atento a ciertas señales en su comportamiento para asegurarte de que es quien dice ser y no unjugadora femenina.

Este artículo explora la posibilidad de que esté jugando contigo y te ofrece señales claras de que te está engañando y no va en serio con la relación. Una vez que descubras la presencia de estas grandes señales de que es una jugadora, podrás estar más alerta para confirmar lo mismo.

¿Cómo saber si alguien te está engañando?

Te sentiste en la cima del mundo cuando conociste a la chica de tus sueños. Por lo que sabes, vuestra relación va viento en popa. Entonces, una buena mañana, ella te da la sorpresa y te abandona. O, alguien te dice que también está saliendo con otra persona.

Naturalmente, te sientes engañada y traicionada. No dejas de replantearte la relación, queriendo saber cómo podrías haberlo evitado. ¿Cómo puedes saber que estás tratando con una jugadora?

Todo lo que tienes que hacer es estar atento a estas grandes señales de que es una jugadora.

1. Se escapa de las citas con demasiada frecuencia

Hacéis los planes juntos, pero cuando llega el momento, ella te deja plantado. No te ha dejado plantado ni una ni dos veces, pero siempre se inventa excusas plausibles para que lo dejes pasar, aunque te sientas terriblemente decepcionado.

Este acto suyo te parece grosero y exasperante. Tienes la sensación de que ya no puedes confiar en que cumpla su palabra. Lo ha hecho demasiadas veces y, a regañadientes, reconoces que ya no puedes confiar en ella. Tú crees que las promesas son importantes y deben cumplirse, pero ella piensa que las promesas son meras palabras y están hechas para romperse.

Cuando piensas en esto, te sientes temeroso de construir una relación a largo plazo con ella. Está claro que no eres su prioridad, lo que te hace preguntarte cómo serán las cosas en el futuro.

2. Coquetea con otros hombres

No hay duda de sus intenciones. Quiere ser el centro de atención en cualquier reunión y disfruta provocando y jugando con los hombres siempre que tiene ocasión. Tampoco discrimina entre hombres casados y solteros. Cuando algunos hombres pican el anzuelo, ella les anima sin reservas.

Cuando la confrontas con esto, te asegura que sólo tiene ojos para ti y que mantenéis una relación exclusiva. Te dice que no debes interpretar demasiado su comportamiento, que sólo está disfrutando de la compañía de la gente.

Si continúa coqueteando incluso después de que le hayas dejado claras tus aprensiones, es una clara señal de alarma, una de las señales de que es una jugadora.

3. Sigue manteniendo su estado civil de "soltera".

Ahora, las redes sociales son el medio preferido para anunciar tu relación al mundo. Cuando hayas encontrado a la persona adecuada con la que compartir tu vida, no dudarás en hacérselo saber al mundo. De hecho, cambiarás tu estado sentimental de "soltero" y llenarás tu página de mensajes cariñosos y fotos con tu nueva pareja.

Las parejas primerizas quieren grabar cada momento de su unión para la posteridad. Por eso, si ella no está muy por la labor de hacerse fotos contigo, es una señal de alarma evidente.

Puede que te ofrezca una explicación sencilla. Por ejemplo, que acaba de salir de una relación y no quiere que el mundo sepa que se ha metido inmediatamente en otra. O peor aún, que todavía no ha roto con su pareja actual aunque piensa hacerlo pronto. Sean cuales sean sus razones, la relación no está tan confirmada como tú pensabas.

4. No te presenta a su familia y amigos

Esa es la progresión natural en una relación. Una vez que os conozcáis bien y os sintáis cómodos el uno con el otro, querrás que ella conozca a tus seres queridos. Eso le dará una mejor idea de quién eres y tu familia y amigos tendrán la oportunidad de conocer a la chica con la que sales.

Sin embargo, cuando tu novia se muestra evasiva al respecto, resulta cuando menos preocupante. Al principio, te puede parecer extraño que vaya sola a visitar a su familia o a la boda de una amiga. Incluso después de insistirle, no parece captar la indirecta. Así que le preguntas directamente el motivo de su comportamiento. Te dará algunas respuestas indirectas que no consiguen convencerte.a ti.

Puede que no esté considerando la relación contigo como una relación a largo plazo. Esta es una de las señales de que es una jugadora.

Reflexiones finales sobre una jugadora

Una mujer jugadora nunca te invitará a su casa ni pasará la noche contigo. No guardará tu número de teléfono o lo hará bajo un alias. Será reacia a poner una etiqueta a vuestra relación y dudará en presentarte a nadie como su novio. Nunca figurarás en sus planes de futuro. Soplará caliente y frío y será inconsistente en su afecto y atención.

Una mujer jugadora es evasiva, poco comprometida y errática a la hora de mantenerse en contacto. Es reacia a las PDA. Si sólo te preocupas de buscarlas, hay muchas señales de que es una jugadora. Si le das más importancia a la confianza en la relación y prefieres entrar en ella con los ojos vendados, no puedes culpar a tu novia por jugar contigo.

Los controles y equilibrios son vitales para una relación sana. Abandonarlos en aras de la confianza es una tontería. Cuando ella te utilice, no puedes culparla porque has estado ignorando las señales de que es una jugadora. Además, no hay necesidad de que te quedes de brazos cruzados y dejes que te engañe. En lugar de eso, deberías buscarte a alguien que te aprecie por lo que eres.